Grupo

 BelMar

Telef:963742457


Qué es la auditoría contable

Actualizado: 04/12/2021

Fecha: 04/12/2021

Introducción

La información contable de una empresa, independientemente de su tamaño o actividad, tiene que ser fiable y acorde a la realidad de la misma. Además, se tiene que elaborar teniendo en cuenta los principios recogidos en el Marco Conceptual de la Contabilidad de la Información Financiera. Para comprobar que la información contable es correcta, hay que realizar una auditoría contable de forma periódica, normalmente anual.

La auditoría contable es, por lo tanto, un proceso sistemático consistente en evaluar las cuentas de una empresa  en un período de tiempo determinado. Se revisan los estados financieros de la empresa, los sistemas de información y los procedimientos operativos, entre otros. El beneficio principal de este proceso es autentificar la integridad y la fiabilidad de la información contable y financiera.

Las auditorías son llevadas a cabo por un profesional externo a la empresa y especializado en contabilidad. Sus tareas consisten en analizar las acciones que la empresa lleva a cabo, así como los documentos donde se registran dichas acciones. Por otro lado, debe valorar si las medidas que la empresa ha tomado son las adecuadas y si son eficaces para beneficiar a la compañía.

Cuándo es obligatoria por ley el hacer una auditoría

Tendrán que auditar sus cuentas anuales aquellas empresas que, durante dos ejercicios consecutivos, cumplan dos de los siguientes tres requisitos:

  • Tener una cifra de negocios mayor a 5,7 millones de euros.

  • Tener un total de activos de más de 2,8 millones de euros.

  • Que la media de trabajadores durante el ejercicio haya superado las 50 personas.

Por otro lado, existen también los siguientes supuestos.

  • Si los socios de la empresa lo solicitan, siempre y cuando estos representen al menos el 5% del capital social.

  • En caso de que se tengan que presentar cuentas consolidadas.

  • Si durante el ejercicio recibe subvenciones o ayudas por parte de las administraciones públicas o fondos de la Unión Europea que sumen más de 600.000 euros.

  • En caso de recibir una subvención, pública o privada, que indique en sus bases la obligatoriedad de auditoría.
    Cuando sus títulos cotizan en alguna de las Bolsas Oficiales de Comercio.

Objetivos de toda auditoría

Los objetivos de una auditoría contable son los siguientes:

  • Conocer la situación actual y real de la empresa en cuanto a contabilidad y finanzas.

  • Detectar posibles fraudes por parte de la empresa.

  • Comprobar que el sistema de trabajo y los procedimientos operativos llevados a cabo son correctos.

  • Comprobar la legalidad de los productos, procedimientos y actuaciones de la empresa.

La auditoría de cuentas debe ser realizada por un experto contable inscrito en el Registro Oficial de Auditores de Cuentas del Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas (ICAC).

Una vez realizada la auditoría, se entregará un informe sobre el análisis de las cuentas, que deberá ser firmado por el experto contable.

Las compañías recurren a la auditoría externa por una razón principal: tener una evaluación objetiva de la situación financiera de la empresa. Como los auditores no tienen ninguna relación con la empresa, no están sesgados de ninguna manera lo que significa que pueden ser objetivos a lo largo del proceso. Esto se traduce en datos precisos para evaluar el progreso o la falta del mismo.

Cuando las empresas contratan auditores externos, deben asegurarse que el auditor no sea un pariente de un amigo del propietario, empleado o gerente. En el caso de que la compañía auditada esté cotizando en bolsa es importante que el auditor no tenga relación con la misma, no tenga acciones ni tenga participación en el capital de ninguna de las empresas subsidiarias.

Si al Legalizar las cuentas anuales de una empresa por parte del Registro Mercantil se comprueba que falta el documento de la auditoría, no se podrá realizar el correspondiente depósito hasta que se haya subsanado el problema.

Etapas de una auditoría contable

Las pasos que hay que cumplir para poder hacer una auditoría contable con garantías de éxito son:

  • Planificación. En la planificación se establece la estrategia que tendrá el proceso de auditoría. El principal objetivo de esta fase es lograr la mayor eficiencia posible, identificando que información se va a solicitar. La planificación dependerá del tamaño y del tipo de entidad, de los procedimientos y actuaciones anteriores de la misma y de los posibles cambios que puedan darse. En esta etapa también se determinan los riesgos potenciales de la empresa, a los cuales se les prestará más atención.

  • Ejecución. En esta etapa el auditor o auditores ejecutan la auditoría siguiendo la planificación y la matriz de riesgos que hemos mencionado en el punto anterior. Además de la información previamente proporcionada, los auditores pueden solicitar información extra.

  • Emisión del informe. Esta es la etapa final de una auditoría contable, y consiste en emitir el informe con la valoración y el análisis de las cuentas.

Técnicas para analizar el proceso contable de la empresa

Revisar los procedimientos de registro

 Toda la información financiera debe registrarse y almacenarse de manera confiable, segura y organizada. Toda la información pertinente como los estados de cuenta bancarios, y las totalizaciones diarias de los datafonos de las cajas registradoras deben estar almacenados como mínimo hasta el final de cada periodo de presentación de la información financiera. Lograr que esta información esté bien almacenada y sea fácilmente accesible, ayudará a resolver todo problema o discrepancia que pueda surgir, y será un prueba del bien hacer del proceso contable.

Revisar los informes que proporciona la contabilidad (Diario, Mayor de las Cuentas, Balances)

Todos los informes que se generan desde el programa que se lleva la contabilidad, permite al auditor tener un rastro para llegar al papel o documento electrónico, y proporciona la historia documentada de la actividad en una empresa.

Estas pistas para el auditor le permite rastrear los datos financieros del libro mayor llegando así al documento de origen (factura, recibo, nomina, etc.). Una pista de auditoría sólida brinda una lista cronológica integral que documenta los pasos tomados para iniciar y llevar a cabo operaciones comerciales.

Determinar si las prácticas contables existentes en la empresa permiten rastrear el proceso completo de una operación financiera con documentos. Si no es así, los procesos contables deben ser fortalecidos para hacer una pista de auditoría suficientemente sólida.

El emplear software de contabilidad para hacer una pista de auditoría electrónica para la empresa permite almacenar y analizar la información contable con facilidad.

Examina el proceso mediante el cual los documentos financieros se entregan actualmente al departamento de contabilidad.

El primer paso para la auditoría contable de una empresa es reunir todos los documentos financieros, tales como las facturas, los recibos, los estados de cuenta bancarios, y entregárselos al departamento de contabilidad para que los procese. Si este proceso es lento o poco confiable, los libros contables se verán afectados y no serán fiables.

Evaluar el proceso que existe para comprobar los controles internos de la empresa.

Los controles internos son aquellas previsiones que ayudan a protegerse de las estafas, los robos y demás problemas contables internos. Separa las tareas relativas a la contabilidad en la medida de lo razonable, por ejemplo, lo mejor es no dejar que la misma persona esté a cargo del dinero en efectivo y la teneduría de libros, puesto que así sería más fácil justificar el dinero en efectivo faltante.

Evaluar que se cumplen las leyes contables y tributarias que la empresa debe cumplir.

 Por requisitos tributarios, lo usual es que por ley las empresas estén obligadas a mantener registros contables estrictos. Es muy importante preparar los registros contables en conformidad con las leyes de del país donde tiene operaciones la empresa, dado que en caso contratio, la administración tributaria podrá imponer sanciones, cobrar intereses de demora, y si los importes defraudados superan cierto umbrales, puede existir delito fiscal y tener que ir a prisión. Adopta los procedimientos oficiales como parte del proceso interno, es una tarea a comprobar por la auditoría.

Emplea las prácticas de auditoría establecidas por organismos reguladores.

 Las buenas prácticas de auditoría deben ser la guía inicial para realizar una auditoría contable interna. Recurrir a un software de contabilidad para empresas, a un asesor tributario es la mejor para tener la garantía para confirmar que  esté acorde a las prácticas de contabilidad generalmente aceptadas.

Las Normas de Auditoría Generalmente Aceptadas (NAGAS) son las normas de auditoría que más habitualmente se usan para auditar empresas privadas.

Compara los registros contables internos con los registros externos.

Prueba la fidelidad de tu teneduría de libros comparándola con registros externos. Por ejemplo, se puede comparar las facturas de compra de proveedores con los propios registros de compra de la empresa. Por ejemplo pedir al proveedor o cliente, el mayor de su cuenta contable y ver si coincide con el mayor de nuestro sistema de contabilidad interno.

Compara las liquidaciones de impuestos reflejadas en la contabilidad con tus declaraciones de impuestos realmente presentadas a las Agencia Tributaria.

Revisar las liquidaciones recientes de pago de impuestos y compáralos con los impuestos pagados y obligaciones impositivas a realizar.

Contenido del informe de la auditoría

La información que deberá de proporcionar el auditor, una vez ejecutada será:

  • Identificación de la entidad auditada.

  • Descripción general del alcance de la auditoría.

  • Opinión técnica de la auditoría.

  • Opinión sobre la concordancia, o no, del informe con las cuentas.

  • Fecha y firma del auditor o auditores que han realizado la auditoría de cuentas.

Posibles conclusiones del auditor tras la auditoría contable

En base a la información proporcionada por la empresa y al resultado de la auditoría llevada a cabo, se pueden distinguir diversos tipos de opinión.

  • Opinión limpia o sin salvedades. Se emite cuando las cuentas auditadas reflejan claramente la imagen de la empresa. También se suele denominar opinión favorable.

  • Opinión con salvedades. Tiene lugar cuando se han encontrado algunas desviaciones en la elaboración de la información relativa a las cuentas anuales de la empresa. Salvo por dicha salvedad, reflejan la imagen fiel de la empresa.

  • Opinión adversa o negativa. Se da cuando existen desviaciones relevantes en la elaboración de la información y en relación al marco normativo de referencia. No reflejan la imagen fiel de la empresa.

  • Abstención u opinión denegada. En este caso, existe una limitación al alcance del trabajo del auditor. Este hecho no le ha permitido obtener evidencia suficiente para emitir un juicio sobre la elaboración de las cuentas y la imagen fiel de la empresa.

 

Enlaces relacionados:

Principios Contables en la Contabilidad

Curso Práctico de Contabilidad